ay y este flash de ultimo momento no tiene nada que ver con los problemas del cariño ni con todo lo que pense del amor en este viaje en el que aprendi que tengo que ser fuerte pero aca estoy, encaprichada, enojada con este pueblo de mierda y sus argentinos tan horribles, tan espantosos para venderte cosas caras en el kiosco, tan peleadores, con ese humor tan hiriente los unos contra los otros y todas mis decisiones de debilucha, ser maestra, estudiar en madariaga, y estoy enamorada de jean baptiste el canadiense, enserio, me derrito antes de dormir, me acuerdo de los gestos los movimientos que estaba todo el tiempo inquieto, el tipo de chico de los que no tengo que gustar, que reia, que hacia ejercicios espontaneos en todas partes, que se trepaba en patas a lo alto para arreglar los cables, que su piel era tan suave, otra vez su risa de fumon, y el frances tambien me gustaba, todo el tiempo hablaba como que estuviera peleando algo, con el labio de arriba para arriba (mas para arriba), los ojitos re chiquitos y una bondad y una dulzura pero asi tambien medio malo, medio malo con los que no nos dejaban pasar gratis a la discoteca, y re flaquito y que toda la ropa le quedaba re bien, y esos castellanos tan putos que tienen, tipo robots, sexys, cuando estabamos borrachos no nos entendiamos nada, me encantan estoy enamorada antes de dormir y no me importa nada, habia un gordito tambien, se parecia a richard como se reia con todo el cuerpo pero frances, intentando ponerse serio, como richard, pronunciando mi nombre haciendome no entender nada, de que estoy haciendo de que esta pasando pero da risa, y no quiero una mierda este pueblo y no tengo fuerzas para emborracharme, estoy enojada, no quiero, quiero estar en peru, quiero tener plata, y me acuerdo de jb siendo lindo por toda la casa, tambien habia uno llamado loik o algo asi, que siempre estaba serio y queria volverse a francia, el estaba preocupado pero sin embargo me prestaba atencion, siempre estaba despierto cuando yo llegaba, charlabamos en rincones extraños como ese patio que veias el cielo o sentados frente a la puerta de la habitacion cinco, la de ellos, varones, de francia, con muchas remeras apiladas recien lavadas que eran de jean baptiste pero el les prestaba a todos, y a la mañana habia un chico que se llamaba juan jose y era peruano, el nunca me veia borracha, el tenia ese acento que despues estaba por todos lados, habia una chica llamada maria que tambien era peruana y limpiaba, y cantaba, cantaba en las habitaciones de la gente mientras hacia la cama y no importaba que durmieran, el ultimo dia ella fue amable conmigo agradeciendo unas aceitunas, hoy fui a comer con mi hermana, estuvo bueno, porque mientras revuelvo las cebollas ella me deja contarle las ineditas de peru, las que no sabe nadie, me voy acordando, y yo que no tengo tanta memoria, quiero saber, para siempre, que habia uno llamado roberto, ese si me veia borracha, estaba a la noche, era muy alto, como uno de los locos adams, tambien me gustaba tener frio en cusco, estar esperando a que todos se preparen, que todo se ponga cariñoso, tocarnos, abrazarnos, y que yo a veces me hartaba y me iba sola por las calles, encontrarme a mi ex novio, en pinamar no lo veia, no lo veia hace miles de meses, porque en pinamar no se queda nadie. y ya no le tengo cariño a este pueblo, algunos drogadictos no me saludaron por mi cumpleaños, y yo que llego en verano, tantas propagandas y tantas mafias. quiero estar en otro lado.